Según expertos de la Cepal, los niveles de pobreza en Latinoamérica seguirán aumentando en los próximos años.
Así: “De acuerdo con un informe especial de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe presentado el pasado junio, los países de la región se encuentran ante una desaceleración del crecimiento económico, una mayor presión inflacionaria y una recuperación lenta e incompleta de los mercados laborales de las repercusiones de la pandemia del covid-19. En consecuencia, aumentarán los niveles de pobreza y la inseguridad alimentaria, según el organismo” (dw.com/es/).
¿Por qué continuará incrementándose la pobreza? “Las razones para la agudización de esta crisis son varias. Por un lado está la persistencia de la pandemia del covid-19, con sus disrupciones sobre el mercado laboral y en las cadenas de suministro. Por otro, la guerra en Ucrania, con la consiguiente inflación y las alteraciones en los sectores de producción primaria como petróleo, gas, aluminio y cereales y otras ramas industriales que producen insumos necesitados en la agricultura, como por ejemplo, fertilizantes” (Ídem).
A todo esto debemos sumar la crisis climática y la recesión que amenaza a Estados Unidos y Europa, y adicionalmente, la desaceleración del crecimiento económico en China, ya que según estiman algunos inversionistas estadounidenses, la misma caerá al 2.5% en la próxima década.
Usando el promedio ponderado correspondiente a 18 países de América Latina, la Cepal informa que en 31 años la pobreza general disminuyó en 16.5 puntos porcentuales, pasando de 50.2% en 1990 y reduciéndose hasta un 33.7% en 2021; mientras que la pobreza extrema ha permanecido congelada, ya que en 1990 era de 15.0% y apenas bajó al 14.9% en 2021.
Los datos equiparables para nuestro país, indican que la pobreza general se redujo en apenas 2.39 puntos porcentuales en igual período, bajando de 75.99% en 1990 hasta llegar al 73.60% en 2021; a su vez, la pobreza extrema mostró una contracción más amplia, debido a que decreció 8.54 puntos porcentuales, desde un 62.24% en 1990 al 53.70% en 2021.
La disminución de la pobreza extrema, resultó mejor en Honduras al estancamiento experimentado en los 18 países del informe cepalino, en tanto los niveles de pobreza general registrados en dichos países Latinoamericanos, es mayor en 6.9 veces a la reducción en Honduras.
