El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, llamó este jueves al Congreso a reactivar la pena de muerte para hacer frente a la criminalidad tras el asesinato de una niña pese a que el castigo es inaplicable por sentencia constitucional.

Los cuatro cargos por los que fue encontrado culpable son conspirar para importar cocaína a EEUU, por el que rnfrenta una pena mínima de 10 años y una máxima cadena perpetua; por posesión de ametralladoras y artefactos destructivos una pena máxima de cadena perpetua y por falso testimonio, una pena máxima de cinco años.

El Ministerio Público pide una pena de ocho años por cada uno de los delitos de fraude y 13 años por el delito de apropiación indebida de manera continuada para Rosa Elena Bonilla de Lobo.

Estuvo más de 10 meses en prisión en 2010 tras ser acusado de la ejecución de siete reos en una prisión en 2006 cuando fue director del sistema penitenciario, pero quedó en libertad porque la fiscalía no pudo comprobar su participación en el caso.

La Corte de Constitucionalidad aceptó la noche del jueves el recurso de dos abogados y derogó la pena de muerte para cinco delitos del Código Penal.