"Ayer descubrimos que un atacante externo había extraído fondos de forma irregular del monedero de Tether". Así comienza el comunicado con el que la moneda virtual Tether anunciaba la sustracción de US$31 millones.
El comunicado, que ha sido retirado en las últimas horas, está aún rodeado de muchas dudas, pero supone uno de los mayores robos conocidos en el mundo de las criptomonedas.
La cantidad sustraída el pasado domingo asciende a US$30.950.010, fondos que fueron transferidos a una dirección no autorizada de bitcóin, según denunció Tether.
El comunicado de Tether -que tiene una paridad fija con el dólar de 1 a 1- tuvo un efecto inmediato en la cotización del bitcoin.
La criptomoneda más popular cayó en torno al 5 por ciento, pero más tarde se recuperó hasta su nivel anterior, superior a los US$8.200. A principios del presente año, el bitcóin cotizaba por debajo de los US$1.000.
Este no es el primer fallo que cuestiona la seguridad en las criptomonedas. Mt. Gox, la mayor casa de cambio de bitcoines, quebró en 2014 tras perder varios centenares de millones de dólares por una vulnerabilidad del sistema.
Como consecuencia de su cierre, los usuarios perdieron unos 850.000 bitcoines, un paquete inversor que, a su cambio actual, hoy valdría unos US$7.000 millones.
El mes pasado, la justicia griega concedió la extradición a Estados Unidos y Rusia de un empresario ruso acusado de estafar miles de millones en bitcoins.
Tether, con una capitalización de US$673 millones, está en el puesto número 19 de las criptomonedas con mayor valor de mercado, según la clasificación de Coinmarketcap.com.
"No canjearemos ninguno de las unidades de Tether robadas. Y estamos en el proceso de tratar de recuperar todos lo robado para evitar que se introduzcan en el sistema", asegura el comunicado emitido por los responsables de esta moneda.
