Por E&N para Banco Nacional
Para el Banco Nacional de Costa Rica la Sostenibilidad es el elemento transformador de su gestión de negocios, donde sus aportes para generar bienestar social y armonía con el ambiente se vuelven una ventaja competitiva que los diferencia.
La entidad ha crecido y evolucionado de un modelo tradicional de negocios hacia una gestión responsable y de esta a una sostenible.
“En esa etapa medimos el éxito de la organización particularmente por el valor agregado que nuestro negocio aporta a la sociedad y al medio ambiente”, destacó Silvia Chaves, jefa de Sostenibilidad del Banco Nacional.
La estrategia de negocios sostenibles de la entidad financiera tiene un enfoque clientecéntrico, por medio del cual se desarrollan productos y servicios que buscan mejorar la calidad de vida de la gente.
Se trata de un modelo de negocios basado en la triple utilidad en el cual priorizan el bienestar social, la protección del ambiente, el combate al cambio climático, la generación de riqueza económica compartida y la democratización de la economía.
El modelo de finanzas sostenibles, por ejemplo, promueve la inclusión financiera, la generación de empleos dignos, el combate a la pobreza, el consumo responsable, entre otros elementos.
El Banco Nacional cuenta con un equipo de colaboradores que día a día se preparan para mejorar la experiencia del servicio al cliente, mientras que para lograr esta condición la institución se ocupa de impulsar el bienestar de su equipo humano desde un enfoque integral (laboral, personal y familiar).
ESCENARIOS VERDES
Iniciativas como BN Desarrollo y BN Mujer brindan apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) que son el motor vital para el desarrollo de Costa Rica y conforman un porcentaje importante del parque empresarial del país.
En el 2021 se realizaron más de 45.000 operaciones con un saldo de 1 billón 178 mil millones concentrados en San José, Alajuela y Cartago, seguidos de Guanacaste, Puntarenas, la zona sur y Heredia.
“El trabajo con las mipymes va más allá de un tema de financiamiento, puesto que se procura empoderar al empresario poniendo una especial atención en las mujeres”, explicó Chaves.
El Banco Nacional desarrolla programas como Transformando Comunidades en el cual se trabajan con asociaciones de desarrollo comunal para impulsar el desarrollo de proyectos productivos. También trabajan con ASADAS (Asociaciones que Administran los Acueductos en las Comunidades).
Las agrupaciones comunales se consideran potenciales mipymes a quienes se les entrega capital no reembolsable para sus respectivos emprendimientos. En el 2021 la institución apoyó a 10 comunidades beneficiando a 56.000 personas. Además, benefició con operaciones de crédito a 45.252 pymes.
A esto se le suma el fortalecimiento de la cartera de productos verdes con el fin de facilitar a empresas y personas sumarse al proceso de descarbonización. La institución brinda acompañamiento y asesoramiento ambiental para que instituciones y empresas inicien o fortalezcan una transición hacia una economía baja en emisiones de carbono.
GENERADOR DE DESARROLLO
El Conglomerado Financiero Banco Nacional de Costa Rica impulsa el desarrollo económico, social y ambiental, adoptando las mejores prácticas de sostenibilidad en estrategia, crédito, cadena de valor y entorno inmediato en concordancia con las iniciativas país.
De acuerdo con Chaves, desde la perspectiva financiera se trabaja por alcanzar niveles de rentabilidad necesarios para dar soporte al desarrollo del país; por ello, se constituyó un modelo de finanzas sostenibles desde donde se impulsa el financiamiento de proyectos con criterios ambientales, sociales y de gobernanza.
A través de procesos internos, la institución desarrolla productos con enfoque digital y criterios sostenibles que amplían la participación en el mercado, así como la eficiencia y la productividad de la organización, medidas que fortalecen el respeto de los Derechos Humanos.
El sector bancario juega un papel fundamental en el crecimiento integral del país. El futuro de la banca tiene su asidero en la sostenibilidad principalmente porque es el motor que debe impulsar la transición hacia una economía sostenible.
“Esto implica la propia transformación de los modelos tradicionales de hacer negocios sino también el acompañar a nuestros públicos de interés en el proceso de financiar al resto de actores para que se sumen en esta evolución”, valoró Chaves.
Por medio de alianzas en las esferas público-público y público-privadas, el Banco Nacional posibilita una reactivación de la economía después de la crisis producto de la COVID-19. Durante el 2021, la institución trabajó con 60 organizaciones entre empresas, instituciones y ONG.
La colaboración entre el sector financiero, particularmente el Banco Nacional y sus cuatro subsidiarias, con el resto de los sectores favorece el desarrollo de la industria, el comercio, el turismo, el sector agrícola y ganadero, el transporte, la construcción, entre otros.
Desde el enfoque clientecéntrico, promovido en el marco estratégico del Banco Nacional, se priorizan las personas y un fin social de la colectividad antes que la generación pura de capital.
Esto les permite promover escenarios de desarrollo más transparentes y participativos como el caso de los Programas de Desarrollo y de otros como BN Mujer, los Consejos de Apoyo Rural, las Ferias del Agricultor, entre otros muchos.
Por medio de estos flancos se fortalece su compromiso con el desarrollo sostenible de las comunidades, la igualdad de oportunidades y la democratización de la economía costarricense.
