Por Lilian Arias, Co Managing Parter en Arias*
Uno de los principales desafíos para la mujer emprendedora es lograr superar la barrera del género: superar los obstáculos que se enfrentan en un entorno que no valora la diversidad, y el machismo que se vive en nuestra cultura. Esa desventaja que culturalmente se vive por ser mujer debe ser la inspiración para luchar por tus sueños.
En ese sentido, tenemos que romper con la cultura que limita a las personas a un solo rol: familia o carrera. Así, hay que entender que ambas no tienen por qué excluirse mutuamente, si no que debemos crear redes de apoyo que permitan un desarrollo de la mujer en todas las áreas de su vida, con un mayor involucramiento de los hombres en el ámbito doméstico y/o familiar, por ejemplo.
Asimismo, otro elemento importante es que los empleadores ya establecidos, medianos o grandes, que ya cuenten con trayectoria, fomenten ambientes laborales favorables a las familias, que permitan a las mujeres profesionales alcanzar su mayor potencial sin tener que renunciar a su rol materno. Así, es con estos empleadores con los que se debe alcanzar alianzas, reconocimiento, mercado, financiamientos, y que pueden ser el puente para los pequeños emprendimientos y generar así más riqueza y oportunidades.
Lograr la credibilidad y abrir mercados es un desafío. Por ello, emprender un negocio con un producto o servicio de buena calidad, innovador, que pueda tener aceptación y competir con otros productos ya existentes requiere esfuerzo y dedicación, mentores y una red de apoyo que le permita establecerse y crecer.
En cuanto al reto del capital de trabajo, o de un financiamiento, la mujer emprendedora, profesional, o empresaria, requiere un aliado en dicho financiamiento y un mentor que la acompañe para que el mismo se estructure con éxito.
Las barreras de licencias, permisos, y requisitos de operar son alcanzables con reformas que incluyan procesos breves y sencillos, y un acompañamiento estructurado para contar con la asesoría gratuita, adecuada y oportuna.
Una regulación que fomente a los pequeños y medianos emprendimientos, con acompañamiento en su desarrollo, estructuración, y crecimiento es fundamental para su sostenibilidad. Y sobre todo tener presente y muy en cuenta que todo emprendimiento, empresa, carrera, negocio, necesita el propósito de alcanzar tu sueño, pasión, mucha dedicación, paciencia y perseverancia.
*Cuenta con más de 25 años de experiencia con algunas de las compañías nacionales e internacionales más grandes de la región asistiéndoles en fusiones, adquisiciones, privatizaciones, financiamientos, gobierno corporativo y planeamiento fiscal. Socia en Arias con experiencia en demostrada historia en la práctica legal.
