Revista Estrategia & Negocios presenta su edición 271 con la sexta edición de Mujeres Desafiantes, una de las producciones más retadoras, por la intensidad de trabajo que año con año asume todo el equipo de periodistas y editores de la revista.
Este año, nuestras páginas plasman los perfiles de 40 mujeres destacadas en diferentes ramas de especialización. Desafiantes que dejan huella y reescriben el futuro de Centroamérica con mirada única.
¿Quiénes son las Mujeres Desafiantes de 2022? Los perfiles que retratamos incluyen a transformadoras, disruptivas, solidarias, innovadoras, emprendedoras e impulsoras del desarrollo, quienes ejercen su influencia con liderazgos positivos y transforman sus entornos.
“Mujeres Desafiantes nació en 2017 con una promesa: visibilizar cada año a nuevas referentes centroamericanas, entrevistarlas, dialogar con cada una, proyectar sus historias de vida y desafíos. Mujeres Desafiantes no es un listado, es un crisol de historias contadas por sus protagonistas. Más de 300 Mujeres Desafiantes en seis ediciones”, Velia Jaramillo, Editora General de Estrategia & Negocios.
Este año, conversamos con Mujeres Sin Límites cómo la Canciller panameña Erika Mouynes, una diplomática auténtica, que visibiliza causas eternamente postergadas como la migración y el cambio climático.
Conozca más perfiles Desafiantes en nuestro especial web
Además, en alianza con Great Place To Work® Institute CARCA presentamos a Los Mejores Lugares para Trabajar® para Mujeres en Caribe y Centroamérica 2022 con los nombres de las 50 organizaciones que han logrado transformarse en espacios con culturas inclusivas, para el desarrollo de sus colaboradoras.
Desafíos y oportunidades
Pese a los avances en materia de equidad de género y de los logros de muchas mujeres pioneras en Centroamérica, la mujer todavía tiene retos por delante.
El Foro Económico Mundial (FEM) estima que, en el mundo, alcanzar la paridad total de género tomará 132 años (cuatro años menos que en 2021), mientras que en Latinoamérica y el Caribe es una tarea que se espera se cierre en 67 años.
Las metas no son fáciles y se ven afectadas por factores como la pandemia del COVID-19, la desaceleración de las economías que detonó la misma emergencia sanitaria y la creciente inflación que agobia a la economía global, ya que en una situación de crisis es la mujer la que resiente más rápidamente efectos como el desempleo, el subempleo o el trabajo no remunerado.
“Las mujeres en Centroamérica tienen un desafío en términos de autonomía económica, ya que la inserción de las mujeres es en sectores de muy baja productividad, con niveles de informalidad importantes”, Lucía Scuro, Oficial de Asuntos sociales de la División de Asuntos de Género de la CEPAL.
Según un análisis de la OIT, entre 2019 y 2020 el índice de empleo de las mujeres en el continente cayó un 9,4 % por los efectos de la crisis sanitaria, mientras que en el caso de los hombres fue del 7 %. Los datos se desprenden del estudio “América Latina y Caribe: Políticas de igualdad de género y mercado de trabajo durante la pandemia” publicado en marzo de este año.
Paz Arancibia Román, especialista regional de Género de la OIT para las Américas, dijo que a nivel global, la región tiene el mayor descenso, lo cual impactó negativamente en los avances alcanzados en los últimos años y detonó en un aumento de las brechas de género en el mercado laboral de manera histórica.
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“Las mujeres de América Latina y el Caribe fueron las más afectadas por la crisis económica que detonó la pandemia del COVID-19 en los mercados laborales, lo cual ha colocado a la región frente al desafío de enfrentar un retroceso sin precedentes en la igualdad de género en el trabajo”, Paz Arancibia Román, Especialista regional de Género de la OIT para las Américas.
Por su parte, Lucía Muñoz, Líder de Capital Humano de Deloitte Spanish Latin America, valoró que para quienes no perdieron su trabajo en la pandemia, las labores vida familiar-trabajo se volvieron más agotadoras.
Mundo poscovid y esperanza en el futuro
Las secuelas de la pandemia em las mujeres fueron enormes. Priscila Chaves, futuróloga, lo define así: “las mujeres fuimos el grupo más excluido y discriminado de la pandemia. La gran mayoría de países tomó acciones para cerrar escuelas en todo el mundo. Muy pocos países tomaron en cuenta el incremento del trabajo en tareas domésticas que recayó en las mujeres”.
Gabriela Torres, CEO de Roots Inc., enfatiza que la educación en casa y del sistema escolar deben generar una mentalidad distinta en las nuevas generaciones a partir de la pospandemia. “Desde pequeños venimos en un camino definido. Si estamos en un parque, los niños pueden caerse, pero las niñas no. No hay que limitar a las niñas, que sepan que duele caerse. (...) Estamos con miedo de intentar, de fallar y al final todos tenemos la capacidad de lograrlo. Desde primaria, todos y todas deberían tener acceso a campamentos de robótica sencillos, que puedan ver normal armar un robot. Ahí se rompe esta brecha”, reflexionó.
Factores de cambio
El especial Mujeres Desafiantes también explora cómo las mujeres están ganando espacios en los círculos gremiales y luchan en favor de otras.
Destaca el caso de Aline Flores, vicepresidente del hondureño Grupo Flores, quien manifestó que la primera experiencia dentro de la Cámara de Comercio e Industria de Tegucigalpa fue la que “marco el norte” de su carrera empresarial con el componente de “hacer un aporte al servicio de la sociedad”, pues fue a través de diversos comités en los que participó que pudo ver como el empresariado puede aportar para hacer la diferencia en la sociedad mediante la generación de empleo, prosperidad compartida, desarrollo sostenible y equidad.
Flores está convencida que los avances que su país logre en paridad y para impulsar el bienestar y prosperidad de las mujeres “significarán un mejor futuro para todos”, ya que en Honduras el desempleo castiga más a las mujeres. Del total de desocupados a 2021, el 53 % son mujeres, (más de 185.000), representando una desocupación de 10,7 %, superior en 3,7 % a la tasa en hombres. “Un país que basa sus políticas en la igualdad de género y en el empoderamiento de la mujer, avanza hacia un desarrollo sostenible”, finalizó.
