El gigante estadounidense de la distribución Wal-Mart anunció previsiones anuales decepcionantes el jueves, invocando el fortalecimiento del dólar, el costo del incremento de los salarios de sus empleados y el cierre de tiendas en Japón.
En su ejercicio fiscal 2014/2015 cerrado el 31 de enero, el número uno mundial del sector registró un beneficio neto de US$16.360 millones, en alza de 2,13% en relación a período anterior.
En el cuarto trimestre, el beneficio neto alcanzó US$4.960 millones, un incremento de 12,07% en relación al mismo período del ejercicio anterior.
Estos resultados se traducen respectivamente en un beneficio por acción ajustado, referencia de Wall Street, superior a las previsiones en ambos casos, de US$5,07 en relación a un año atrás y US$1,61 en el trimestre, contra US$4,99 y US$1,54 esperados en promedio.
El grupo anunció asimismo que a partir de abril, aumentará el salario de unos 500.000 de un total de 1,3 millones de empleados en Estados Unidos que trabajan horario completo a US$9 la hora, US$1,75 más que el salario mínimo en el país.
Estos anuncios se inscriben en el marco de un plan de inversiones de US$1.000 millones presentado el jueves por Wal-Mart, que prevé reducir los beneficios a corto plazo.
