Por estrategiaynegocios.net
La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) realizó, en Ciudad de Panamá, el foro de aviación sostenible ‘El camino hacia carbono neutro en aviación’, en el marco de la Conferencia Anual de la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE).
El evento reunió a autoridades, expertos, representantes de la industria de la aviación, fabricantes de aeronaves y productores de combustible, para debatir sobre la importancia que tiene el desarrollo de combustible sostenible de aviación (SAF, por su ssiglas en inglés) para alcanzar este objetivo.
La IATA estima que la producción de SAF alcanzará al menos 300 millones de litros en 2022, un aumento del 200 % con respecto a la producción de 2021 de 100 millones de litros. Cálculos más optimistas estiman que la producción total en 2022 podría alcanzar los 450 millones de litros.
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Las aerolíneas se comprometen a lograr cero emisiones netas de CO2 para 2050 y ven a SAF como un contribuyente clave. Las estimaciones actuales esperan que SAF represente el 65 % de la mitigación necesaria para esto, lo que requiere una capacidad de producción de 450.000 millones de litros anuales en 2050.
El SAF es un tipo de combustible fabricado a partir de aceites, lubricantes o grasas de origen biológico o de animal, residuos orgánicos, forestales, desechos industriales, entre otros, que se destaca por reducir las emisiones de carbono durante su ciclo de vida hasta un 80 % y su capacidad de ser utilizados en las aeronaves con tecnología existente actualmente sin hacer cambios a los motores. Actualmente, pueden ser mezclados con combustible tradicional pero aún no están disponibles a gran escala, por lo que los precios son todavía muy superiores a los de un combustible tradicional.
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Hasta la fecha, se han operado más de 450.000 vuelos comerciales con SAF, y el creciente número de aerolíneas que firman acuerdos de compra con productores envía una señal clara a los mercados de que se necesita SAF en cantidades mayores y, en lo que va de 2022, se han firmado alrededor de 40 acuerdos de compra.
Para que la transición hacia SAF avance rápidamente y se pueda garantizar su suministro y acceso, es necesario el apoyo de las autoridades y los gobiernos en el establecimiento de un marco político- regulatorio que incluya incentivos para su producción y distribución, considerando, además, que América Latina tienen enormes oportunidades para liderar su desarrollo.
