Por Daniel Zueras, estrategiaynegocios.net
Lo que comenzó siendo una tienda al detalle de modas pasó a crecer hasta convertirse en una tienda por departamentos cubriendo ropa para toda la familia, accesorios para mujer y hombre, hogar, cosméticos, telas, pasamanería, telas para cortina y el hogar, electrodomésticos, y múltiples líneas.
Llegó la expansión y contaron con un total de seis tiendas. En 2005 se quedaron de nuevo solo con la original, en el centro de San José. Su actual gerente general, Juan Carlos Crespo, nieto de don Santiago, entró a la empresa en 1980 como gerente de sucursales.
Juan Carlos Crespo habla con cariño de su abuelo, y recuerda que tenía buen don de gentes. "Tenía ese don de compartir con las personas, compartir sus necesidades, ayudar a llenar esas necesidades, y colmillo comercial. Le gustaba hacer comercio".
Tienda La Gloria continúa identificando las necesidades de sus clientes, y realiza una selección editada de lo disponible en el mercado. "El valor agregado que damos es poder identificar esas necesidades e ir a buscar esos artículos, en lugar de poner todo lo disponible en el mercado".
Y cuenta una anécdota de don Santiago, para establecer ese nexo emocional y personal con sus clientas, trataba de saludarlas a la entrada del negocio con el nombre de cada una. "Cuando no lo sabía, o no se acordaba, las llamaba doña Maria, porque decía que todas las mujeres en Costa Rica, en alguna parte de su nombre se llaman Maria".
A este establecimiento de larga data le ha tocado pasar momentos muy duros. Dos guerras mundiales y la Gran Depresión, una guerra civil, dos incendios… Y la COVID-19. En todos estos años apenas han cerrado las puertas más que por los incendios, una gran remodelación en 2003 (apenas seis días, pero tenían otras sucursales) y este año por las instrucciones del Ministerio de Salud.
Crespo apunta que este está siendo su año más duro al frente de La Gloria. Por culpa de la pandemia han tenido que pasar de 70 empleados a 20 personas en este momento, muchos de ellos en media jornada, "y estamos en modo de supervivencia. Es un año complicado". Pero se muestra optimista de cara al futuro, y apunta que han realizado una fuerte inversión para tener una robusta plataforma de correo electrónico.
Lo que comenzó siendo una tienda al detalle de modas pasó a crecer hasta convertirse en una tienda por departamentos cubriendo ropa para toda la familia, accesorios para mujer y hombre, hogar, cosméticos, telas, pasamanería, telas para cortina y el hogar, electrodomésticos, y múltiples líneas.
Llegó la expansión y contaron con un total de seis tiendas. En 2005 se quedaron de nuevo solo con la original, en el centro de San José. Su actual gerente general, Juan Carlos Crespo, nieto de don Santiago, entró a la empresa en 1980 como gerente de sucursales.
Juan Carlos Crespo habla con cariño de su abuelo, y recuerda que tenía buen don de gentes. "Tenía ese don de compartir con las personas, compartir sus necesidades, ayudar a llenar esas necesidades, y colmillo comercial. Le gustaba hacer comercio".
Tienda La Gloria continúa identificando las necesidades de sus clientes, y realiza una selección editada de lo disponible en el mercado. "El valor agregado que damos es poder identificar esas necesidades e ir a buscar esos artículos, en lugar de poner todo lo disponible en el mercado".
Y cuenta una anécdota de don Santiago, para establecer ese nexo emocional y personal con sus clientas, trataba de saludarlas a la entrada del negocio con el nombre de cada una. "Cuando no lo sabía, o no se acordaba, las llamaba doña Maria, porque decía que todas las mujeres en Costa Rica, en alguna parte de su nombre se llaman Maria".
A este establecimiento de larga data le ha tocado pasar momentos muy duros. Dos guerras mundiales y la Gran Depresión, una guerra civil, dos incendios… Y la COVID-19. En todos estos años apenas han cerrado las puertas más que por los incendios, una gran remodelación en 2003 (apenas seis días, pero tenían otras sucursales) y este año por las instrucciones del Ministerio de Salud.
Crespo apunta que este está siendo su año más duro al frente de La Gloria. Por culpa de la pandemia han tenido que pasar de 70 empleados a 20 personas en este momento, muchos de ellos en media jornada, "y estamos en modo de supervivencia. Es un año complicado". Pero se muestra optimista de cara al futuro, y apunta que han realizado una fuerte inversión para tener una robusta plataforma de correo electrónico.
