La aerolínea estadounidense Delta AirLines registró una pérdida neta de US$5.700 millones en el segundo trimestre del año, pero se mantiene con liquidez de US$15.700 millones a fines de junio para enfrentar las consecuencias de la pandemia.
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Su facturación cayó US$11.000 millones (88%) comparado con el segundo trimestre de 2019, hasta US$1.470 millones. La pérdida por acción alcanzó US$4,43.
Las cifras de facturación están en línea con los US$1.400 millones esperados por los analistas, en tanto la pérdida por acción es algo superior a los US$4,12 que proyectaban.
En el segundo trimestre de 2019 Delta registró ganancias netas de US$1.400 millones.
El coronavirus y las medidas de confinamiento para combatirlo hicieron de la industria aérea uno de los sectores más afectados por la crisis sanitaria.
Las compañías aéreas recibieron préstamos del gobierno de EEUU por unos US$25.000 millones.
