TCL Communication presentó en Barcelona la apuesta de la compañía en materia de pantallas flexibles.
La tecnológica aprovechó los reflectores del Mobile World Congress (MWC) para mostrar varias posibilidades para el uso de estos dispositivos, entre ellos una especie de libro, un smartphone que se transforma en smartwatch y otras aplicaciones plegables de bolsillo.
La firma, dueña de las marcas Blackberry y Alcatel, se monta así a una ola que aún tiene camino por recorrer, pero que en el caso de TCL tiene como objetivo hacer dispositivos asequibles, fieles al segmento al que apunta la marca.
Gabriel Alejandro Filippi, director de producto y operaciones para América Latina de TCL Communication, dijo a estrategiaynegocios.net que la empresa pretende lanzar su línea de pantallas flexibles hacia 2020, siguiendo la tendencia del mercado.
Filippi, sin embargo, anticipó que aún hay desafíos en esta materia ya que solo se trata de entregar una pantalla con esta capacidad al mercado, sino garantizar su durabilidad y de la compatibilidad con los desarrolladores de apps.
La versatilidad de los diseños, más allá del tradicional rectángulo, genera desafíos para los desarrolladores que tendrán que adecuar aplicaciones populares -como Snapchat o de Instagram, por ejemplo- a formatos distintos al que usan ahora.
El ejecutivo detalla que aún se trata prototipos, pero están en conversaciones con los desarrolladores para avanzar en este sentido.
La compañía, también dueña de una línea de producción pantallas de TV, usa ese conocimiento para el desarrollo de su propia pantalla para smartphones, pero aún trabaja en la adecuación de sistemas que faciliten, por ejemplo, que una pantalla se doble constantemente sin que los componentes detrás de la pantalla se doblen y corten como ocurría con los antiguos teléfonos de flip.
Uno de los prototipos más esperados es el de un smartphone que se transforma en smartwatch, TCL ha patentado una bisagra 'dragón' con la que busca facilitar la forma en la que se dobla una pantalla y que se adecué a una muñeca, por ejemplo, pero otro reto importante es como se suministrará electricidad y de hacerlo de forma estética, sin que altere el diseño o lo vuelva pesado.
De momento, el prototipo de TCL es más delgado que el presentado la semana pasada por la surcoreana Samsung que ya lanzó a su Fold al mercado por un precio que ronda los US$1.800.
Stefan Streit, general manager of marketing de TCL, dijo que buscan de estos dispositivos sean fluidos. En ese sentido no tienen prisa por ser los primeros en salir al mercado.
TCL, con Alcatel, se afianza como un jugador relevante en el mercado de entrada y en el medio y medio alto. Filippi estimó que cuando entren al mercado de pantallas flexibles su trabajo será democratizar su uso
En la previa del MWC (que comienza oficialmente el lunes 25), la tecnológica presentó dos nuevos modelos el Alcatel 1S que trae un CPU octacore, 3GB de RAM y 32 GB de ROM, además d extras como pantalla con tecnología 2.5D Glass, doble cámara principal, efecto bokeh, sensores de huellas y al sistema operativo Android P, además del Alcatel 3 que tiene un procesador Qualcomm octacore, 3GB de RAM y 64 de ROM, en un diseño optimizado que tiene por ejemplo el notch en la pantalla para la cámara de selfies (de 8MP), además de su doble cámara principal de 16MP y 5MP.
Los productos elevan a la categoría de inicio sin embargo, saldrían al mercado por un valor de menos de US$250 y etsarán disponibles en América Latina en el transcurso de 2019.
