Todo el mundo ha tenido que lidiar con personas problemáticas en algún punto de su vida. En una situación ideal, es una persona que puedes mantener alejada de tu espacio personal y que no te afecta de una manera directa ni constante. Sin embargo, a veces la persona tóxica está en la oficina
Cuando eso pasa, puede que tu primer instinto sea tratar de ayudar. El problema es que las personas problemáticas difícilmente quieren dejarse ayudar. Lo ideal es que puedas alejarte, pero a veces es imposible. Si ese es tu caso, esto es lo que tienes que hacer:
Practica la comunicación asertiva
Identifica exactamente qué es lo que te molesta de la persona y aprende a comunicarlo de una manera asertiva y sobre todo, pacífica.
Aprende a expresar lo que sientes
Hay muchas maneras de expresar lo que sientes, pero la mejor para hacerlo ante una persona tóxica, es enfocando todo en ti. En vez de "tú me haces sentir molesto", di "yo me siento molesto". Enfócate siempre en ti para que el otro no se sienta atacado.
Responsabilízate por tus actos
Las personas tóxicas aman señalar las faltas en los demás para no tener que hablar de las propias. Adelántate y responsabilízate por lo que hayas hecho
Haz un plan de acción
Presenta tus límites, déjale saber qué estás dispuesto a tolerar y qué no. Déjalo lo más claro que puedas.
Busca posibles soluciones
La persona tóxica no lo hará, así que si esperas tener soluciones a la situación, dependerá enteramente de ti.