Por estrategiaynegocios.net
El 98 % de las solicitudes hechas para que nicaragüenses sean acogidos bajo la figura del parole humanitario-que permite ingresar y trabajar en Estados Unidos por dos años-han sido aprobadas, de acuerdo a datos de la Nicaragua American Human Rights Alliance (Nahra).
Unos 22.000 migrantes, entre nicaragüenses, cubanos, haitianos y venezolanos lograron ingresar a Estados Unidos de forma legal bajo la figura del parole humanitario en febrero de 2023, según registros de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés). El cupo mensual establecido de ingresos de extranjeros bajo la figura del parole es de 30.000 personas, es decir que no se llenó la cuota el mes pasado.
Mientras tanto, las detenciones o “encuentros” en la frontera terrestre sur estadounidense de cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos se redujeron, de un promedio semanal de 1.231 migrantes que se contabilizaban hasta inicios de enero de 2023, a tan solo 46 migrantes, según cifras hasta el 28 de febrero pasado. Esto ha significa una disminución del 98 %.
Las autoridades de la CBP atribuyen la caída en las detenciones en fronteras terrestres de nicas, venezolanos, haitianos y cubanos, a los resultados del programa de parole humanitario.
El establecimiento del programa de parole humanitario ocurrió en paralelo al cierre de la frontera terrestre estadounidense ordenado por el presidente Joe Biden para las personas provenientes de Nicaragua, Venezuela, Cuba y Haití, luego de que en 2022 se diera un incremento sustancial de migrantes de esas nacionalidades buscando asilo en Estados Unidos.
Según la CBP, el ingreso de estos 22.755 migrantes a través del parole humanitario es prueba “del beneficio de estos procesos legales para promover una migración segura y ordenada, al tiempo que reducen los encuentros a lo largo de la frontera suroeste”.
Tras el anuncio del cierre de fronteras terrestres para nicaragüenses que buscaban asilo en Estados Unidos efectuado el 5 de enero de 2023, las detenciones de estos bajaron drásticamente.
En febrero pasado, se registraron 3.326, y en enero, otras 3.790. Ambas cifras, en promedio, son apenas una décima parte de la cifra registrada en diciembre de 2022, que fue 35.487 nicaragüenses.
Con información de Confidencial
