Por Pablo Balcáceres - Revista E&N
Las remesas familiares en Guatemala alcanzarán una cifra cercana a los US$20.000 millones este 2023, proyectó la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa).
Estos flujos de dinero comenzaron un buen pie este 2023. En enero ingresaron US$1.386,5 millones, US$206 millones adicionales comparados con enero de 2022, es decir, un aumento del 17,4%.
Guatemala viene de recibir US$15.295,7 millones de remesas en 2021 y US$18.040,3 millones en 2022, comentó Fernando Spross, investigador asociado del área económica de Fundesa.
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“(Este año) se espera un monto cercano a los US$20.000 millones, esto ya representaría cerca de un 20% del Producto Interno Bruto, que ya estimamos una cifra significativa”, comentó Spross.
En términos relativos este indicador desaceleraría si se compara con el crecimiento anual de 2022, que fue del 17,9%. En 2023 el avance rondaría entre el 10% y 11%.
Pero unas remesas cerca de los US$20.000 millones casi duplicaría los niveles prepandemia. En 2019 Guatemala estimó un ingreso de US$10.508 millones en las ayudas monetarias que envían los residentes en el extranjero a sus familiares.
El desempeño positivo está ligado con la actividad económica de Estados Unidos, que continúa tras la pandemia del COVID. “Los trabajadores guatemaltecos trabajan en actividades como construcción y servicios que se mantienen en crecimiento. Ese es el fundamento de por qué crecen las remesas”, analizó Spross.
Las divisas por remesas vienen superando a las exportaciones. Guatemala exportó bienes por US$15.684,3 millones en 2022, cifra US$2.356 millones menor al dinero que envían los guatemaltecos de la diáspora.
Según cifras del Banco de Guatemala, las importaciones rondaron los US$32.121 millones en 2022, lo que resultó en un déficit comercial de US$16.436,7. Las remesas logran compensar el desbalance.
