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Lo que pierde Guatemala con los aviones en tierra y el cierre al turismo

Con la suspensión de los vuelos comerciales la industria aérea dejará de contribuir en US$600 millones al producto interno bruto (PIB) de Guatemala informó la IATA. Están en riesgo 43.170 empleos relacionados con el sector.

2020-07-31

Por Prensa Libre

La caída del sector en Guatemala es de alrededor del 60% por las restricciones derivadas del coronavirus, expuso John Meisterl economista de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).

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Mencionó que solo está en operación el 6% de vuelos, con los vuelos humanitarios.

En un escenario base se espera que el mercado de vuelos domésticos en el país recupere hasta en el 2022 las cifras registradas en el 2019, agregó.

La entidad estima que esta recuperación será con mayor rapidez con respecto del mercado de vuelos internacionales que tardará dos años más que la interna, y que llegaría hasta el 2024.

Este pronóstico podría cambiar dependiendo del deterioro de la economía y podría provocar una recuperación más lenta.

Meisterl dijo que se debe tener certeza en las fechas de reapertura para que las aerolíneas puedan hacer los ajustes necesarios para reiniciar la operación.

Datos de la IATA reportan que esa industria genera US$1.100 millones para el PIB de Guatemala, y ahora el sector dejarán de aportar US$600 millones.

El economista explicó que la conectividad aérea genera un derrame de US$777 millones sobre el sector turismo.

Además, genera unos 75.900 empleos en el país, de los cuales 16.400 son directos a la industria y 59.500 al sector turismo.

Sin embargo, con el impacto actual se estima que hay 43.170 puestos de trabajo en riesgo, agregó.

Motty Rodas, directora ejecutiva de la Asociación Guatemalteca de Líneas Aéreas (Agla), opinó que si se toma en cuenta el impacto de los viajeros en el turismo, el número de puestos de trabajo en riesgo es mayor en ese sector, ya que ambas están muy relacionadas.

La IATA menciona que también es un reto recuperar la confianza de los viajeros. La entidad hizo una encuesta al respecto y detectó que se ha incrementado la cantidad de personas que esperarían seis meses o más para viajar, mientras que ha disminuido el número de personas que viajarían antes de dos meses.

"Debemos trabajar de la mano gobierno e industria para potenciar el reinicio del sector aéreo, aprovechar los beneficios del sector aéreo aporta a la economía y retornar rápidamente la conectividad aérea", agregó el economista de IATA.

Mientras que México, Brasil y Chile mantuvieron abiertos los mercados aéreos, en tanto Ecuador y Perú abrieron sus vuelos internos.

El viceministro de Comunicaciones y Transportes Mariano Díaz, mencionó que el gobierno seguirá impulsando su plan de inversiones en aeropuertos, aeródromos y puertos, así como en carretas, entre los que están el Aeropuerto Internacional La Aurora y el nuevo aeropuerto de carga que se impulsa en San José, Escuintla, y los cuales, dijo ahora son necesarios para la reactivación económica.

Para este último se prevé invertir US$30 millones, en tanto el proyecto de modernización y concesión del Aeropuerto La Aurora se mantiene y se espera lanzar el evento el próximo año, dijo érick Uribio, director ejecutivo interino de Agencia Nacional para Alianzas para el Desarrollo de Infraestructura Económica (Anadie).

El plazo de concesión para la operación sería de 25 años. El monto de inversión se estima en US$117 millones además de otros US$10,7 millones de proyectos necesarios a futuro.

Planificar el regreso y el futuro

Shyamala Duraisingam, gerente de diseños para aeropuertos de la firma Currie & Brown en México dijo que ahora cada país o cada autoridad deberá planificar qué tipo de aeropuerto quiere y necesita.

No en todos los casos funciona la implementación de los nuevos sistemas además se debe analizar los costos y la rentabilidad, agregó.

Dentro de las mejores prácticas internacionales para generar confianza en los pasajeros ahora la tendencia será medidas de servicios sin contacto o con el menor contacto posible, y los controles de temperatura y otros, para que un pasajero haga su chequeo de ingreso, o incluso en algunos lugares se prevé el chequeo de maletas por el pasajero sin intervención de personal de la aerolínea.

Esto puede incluir la recepción de boletos y las compras en el puerto libre, donde se podrían llegar a hacer compras por anticipado.

Ahora se necesitará planes de inversión flexibles para adaptarse a la demanda, agregó.

Los cuatro expertos participaron en foro Situación y proyecciones para el sector aeroportuario frente a los desafíos para superar el covid-19, impulsado por Anadie.

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