Estados Unidos y los países del Triángulo Norte de Centroamérica anunciaron el miércoles un plan para endurecer el combate a las redes de tráfico de personas y a los grupos criminales en la región. Los representantes del gobierno estadounidense aprovecharon para pedir a los funcionarios que trabajen para detener la formación de caravanas que buscan llegar a su territorio sin pasar por el proceso legal.
Kirstjen Nielsen, secretaria de Seguridad Nacional en la administración del presidente de EE.UU., Donald Trump, encabezó la visita. Nielsen explicó que este Memorando de Cooperación formal entre Ministerios de Seguridad busca combatir la trata de personas y el tráfico ilícito de migrantes, contrarrestar el crimen organizado y las pandillas y proteger a poblaciones vulnerables. La secretaria de Seguridad Nacional lo describió como 'llevar orden donde hay caos'.
Se trata de un 'compacto regional'; por lo tanto, delega compromisos específicos y obligaciones para los países que lo suscriben. La ejecución tiene fechas de cumplimiento estrictas, además. 'Apeguémonos al cronograma que establecimos hoy. Vamos a finalizar nuestro plan regional lo más rápido posible', sostuvo Nielsen.
El plan, suscrito por Estados Unidos, El Salvador, Guatemala y Honduras, incluye acciones como ampliar el intercambio de información y de inteligencia en toda la región, incrementar la cooperación policial, intensificar la comunicación con la población sobre los objetivos de este acuerdo y fortalecer la seguridad fronteriza entre los países firmantes.
Nielsen se refirió a las caravanas que han salido de Honduras y El Salvador con la intención de llegar a Estados Unidos, pero al margen del procedimiento legal para hacerlo. "Hoy le pido a cada uno que de ustedes que muestren un liderazgo audaz para detener la formación de nuevas caravanas, que han traído violencia, crimen e inestabilidad a la región y más allá", expresó. La funcionaria espera que México se pueda incorporar a este compacto.
Funcionarios de los tres países han dicho en ocasiones anteriores que los migrantes se unían a las caravanas con engaños, pero nunca hubo acusaciones directas, al menos en público. Desde el año pasado, han salido al menos cuatro caravanas, en su mayoría integradas por hondureños y salvadoreños. Estos migrantes esperan entrar y obtener el asilo en Estados Unidos, o lograr una situación económica que les provea una vida digna. Pero la reacción del presidente estadounidense Donald Trump ha sido enviar personal militar a la frontera y presionar, con todos los medios de los que dispone, por la ampliación del muro en la frontera sur con México.
"Esta reunión es importante puesto que con la misma podemos llegar a acuerdos importantes entre los tres países y Estados Unidos y avanzar en el logro de este gran objetivo, que nuestra región alcance mayores niveles de seguridad, de tranquilidad", indicó el ministro de Seguridad de El Salvador, Mauricio Ramírez. Con Ramírez participaron el ministro de seguridad de Guatemala, Enrique Degenhart; el minsitro de seguridad de Honduras, Julián Pacheco y la embajadora de Estados Unidos en El Salvador, Jean Manes.
Con reportes de Reuters
