Por crhoy.com
La nueva calificación es B+, la cual es una disminución con respecto a su anterior nota (BB-).
La calificadora también asignó una perspectiva negativa, la cual refleja una posibilidad de una nueva rebaja en la calificación en un plazo entre los 6 y 24 meses debido a una erosión mayor a la esperada de la carga de la deuda del Gobierno o signos de debilitamiento del acceso a la liquidez, debido a choques externos o una administración deficiente de la deuda.
"Si no se implementa de manera efectiva la reciente reforma tributaria, y si se implementan medidas fiscales adicionales si es necesario, se podría generar un aumento continuo en la carga neta de la deuda del gobierno general, lo que contribuirá a aumentar los gastos por intereses", señala un informe de la calificadora.
Según la empresa, las rigideces en la gestión de la deuda y un nivel ya elevado de deuda soberana denominada en moneda extranjera, podría elevar la vulnerabilidad del soberano ante choques externos.
Empero, S&P adelantó que podría revisar la perspectiva y ponerla en "estable" si el gobierno logra reducir su déficit fiscal lo suficiente como para estabilizar gradualmente su carga de la deuda.
La nueva calificación es B+, la cual es una disminución con respecto a su anterior nota (BB-).
La calificadora también asignó una perspectiva negativa, la cual refleja una posibilidad de una nueva rebaja en la calificación en un plazo entre los 6 y 24 meses debido a una erosión mayor a la esperada de la carga de la deuda del Gobierno o signos de debilitamiento del acceso a la liquidez, debido a choques externos o una administración deficiente de la deuda.
"Si no se implementa de manera efectiva la reciente reforma tributaria, y si se implementan medidas fiscales adicionales si es necesario, se podría generar un aumento continuo en la carga neta de la deuda del gobierno general, lo que contribuirá a aumentar los gastos por intereses", señala un informe de la calificadora.
Según la empresa, las rigideces en la gestión de la deuda y un nivel ya elevado de deuda soberana denominada en moneda extranjera, podría elevar la vulnerabilidad del soberano ante choques externos.
Empero, S&P adelantó que podría revisar la perspectiva y ponerla en "estable" si el gobierno logra reducir su déficit fiscal lo suficiente como para estabilizar gradualmente su carga de la deuda.