Para inicios del segundo trimestre del año 2015, tanto la Comisión Económica para Latino América y el Caribe (CEPAL) como el Fondo Monetario Internacional (FMI), convergen en sus previsiones macroeconómicas en asegurar que Latinoamérica tendrá un crecimiento menor al proyectado a principios del año. El freno del automóvil pasó a reducir la velocidad de un +2,2% a un +1,0%.
Lo anterior se traduce en un miserable crecimiento económico, pues la región en los últimos años había sido considerada como "emergente" y de gran apuesta económica por muchos inversionistas. Y ahora, tanto la CEPAL como el FMI le han "quitado atractivo" a la región, el cual traerá problemas para sus habitantes.
Uno de los rubros más afectados que tiene esta región, es que lamentablemente mantiene una dependencia muy arraigada sobre los productos básicos o también conocidos como materias primas; los cuales han sido cotizados últimamente hacia la baja. El mercado internacional, liderado por China -que vive una desaceleración en su economía a 6,8%- ha dejado de adquirir este tipo de productos (baja en el consumo). Por lo tanto, basados en la Ley de Oferta y Demanda, cuando los productos no son demandados, existe una disminución en sus precios.
Reforzando lo anterior, la directora general FMI, Christine Lagarde manifestó en rueda de prensa que 'es importante que el mundo entienda que se acabaron los tiempos de las vacas gordas para las materias primas, que tantos impulsos favorables proporcionó al crecimiento en la región'.
La clave del éxito debe estar centrada en la producción de bienes y servicios que otorguen valor agregado en cada uno de sus productos. Ejemplo de esto se menciona en vender ensalada de frutas en lugar de las frutas por separado. El primero puede ser valorado mucho más caro que los precios internacionales fijados por los mercados forma individual. Por lo tanto, incrementará el flujo de dinero y por ende, mayor ganancia para el país que lo promueva.
Cabe recordar que el ajuste en el crecimiento de Latinoamérica del FMI como de la CEPAL es como estudiar el comportamiento de los arboles en general (ver el bosque) y no de forma individual (cada uno por separado). Hay que destacar que muchas economías sí crecerán a ritmos muy positivos, envidiables para el resto de las naciones de la región.
Países como Panamá (+6%), Perú (+5,5%), Bolivia (+5%) y Nicaragua (+5% ), lideran los crecimientos más importantes en la región. Incluso, naciones como México (+3,5%) e incluso Colombia (+3,6% ), aportan un gran impacto positivo para lo que será el cierre fiscal del año en curso.
Lo interesante de todo esto, es que Latinoamérica posee otra camada de países, que le están "metiendo el freno" a estos compañeros de juego.
1) Brasil (PIB: US$2,24 billones): El país más importante en la región en términos tanto económicos como de población se refiere. La séptima potencia mundial ha pasado de un +1,3% a una desaceleración de -1,0%. En primer lugar, los problemas domésticos que mantiene el Ejecutivo Nacional con los escándalos de corrupción de la estatal Petrobras han repercutido en todos los sentidos. La empresa, que emplea a más de 86.000 personas, ha visto muy comprometidas sus deudas "sociales" y que, con la caída del precio del barril de petróleo, se complican aun llevar a cabo dichas deudas. Seguidamente, el país "mais grande do mundo" está viviendo una economía menos pujante. Las exportaciones brasileñas a América Latina y el Caribe cayeron 14% el año pasado comparadas con el anterior y siguieron hundiéndose 21,5% en los dos primeros meses de este año respecto al mismo período de 2014.Y las compras brasileñas a países de América Latina y el Caribe también se contraen, aunque menos (8% en 2015 y 16% durante enero y febrero de este año). Y también, el gran aliado asiático se ha convertido en su competidor más importante, debido a las grandes inversiones que están ejecutando China en la región, que le ganan terreno a las participaciones brasileras en países como Venezuela o Argentina, irónicamente sus socios más importantes en el Mercosur.
2) Argentina (PIB: US$609.900 millones): Este país fue centro de atención a mediados del año pasado, cuando los un grupo de fondos de inversión (Fondos Buitres) reclamaban el pago de deuda soberana y que llevó, rápidamente, a que las calificadoras de riesgo redujeran este indicador a dicha nación. El país proyecta una desaceleración actual 2015 de un -0,3% basado en el descenso en su calificación crediticia hasta 'default selectivo' como consecuencia del incumplimiento de los pagos de los bonos de la deuda, tema que limita el acceso al mercado de capitales y condiciona las perspectivas económica. Otros factores como los son el deterioro en el clima de los negocios en las barreras comerciales a las importaciones que la Argentina ha venido implementando, la grave situación fiscal apalancada en un fuerte gasto público y la cercanía a China - quien se viene desacelerando-, alejándose de sus socios que mantenía originalmente (Estados Unidos y Europa), han repercutido negativamente en la economía gaucha.
3) Venezuela (PIB: US$438.300 millones ): El gran país petrolero es el mejor ejemplo de cómo una nación no ha sabido capitalizar sus riquezas naturales, ubicación geográfica ni tampoco, de su capital humano. Manifestando un freno en la economía de un -3% según CEPAL o un -7% del FMI, es el gran causante de la desaceleración de Latinoamérica. La gran dependencia del petróleo (75% del PIB) tasado con precios muy por debajo de los pronosticado en su presupuesto anual como el gran gasto publico comprometido por parte del gobierno nacional, afectan drásticamente al indicador de crecimiento económico. El ambiente de negocios es muy hostil y hablar de inversionistas es solo para contarlos con los dedos de las manos. La desequilibrante economía venezolana basada en tres tipos de cambios "oficiales" pero que en cualquiera de los casos, es un viacrucis la adquisición de divisas; ha convertido a Venezuela en un foco de desesperación social donde la inflación ya se proyecta cercana al 100%. Esto último afincado en escases de productos que han sido consecuencia de un destrozo casi total del aparato productivo del país. A su vez, las restricciones de viajes ocasionados por la administración súper controlada de moneda extranjera ha repercutido en que los venezolanos cada día deseen viajar al exterior "On Way". El deseo de vivir en una economía abierta ha hecho que el país pierda capital humano y como también, el flujo de inversiones.
Los países de Latinoamérica deben estar consolidados pues en la "unión está la fuerza". El panorama de la región debe reflejar mejores indicadores de crecimiento y se recomienda verse como el "bosque" y no como "arboles". Hay que aprender de quienes Sí LO ESTAN haciendo bien y acomodar las velas para cuando el viento sople en dirección contraria. La humildad de países quienes manifiestan crecimientos importantes deben ser el ejemplo de estos países que "meten el freno" al acelerador económico de la región.
*Analista Económico. Profesor Universitario.
