Ocio

El bienestar es cuestión de sensatez, no de dinero

En los últimos 30 años no es algo que se encuentre al alcance de todos. Por el contrario costosos controles, suplementos, medicamentos y tediosas restricciones parecen ser en los últimos tiempos la elección de muchos. De hecho, la salud parece haberse convertido en un privilegio o en una especie de suerte que favorece a quien ostenta.

    2014-02-27

    En los últimos 30 años, el bienestar no es algo que se encuentre al alcance de todos. Por el contrario, costosos controles, suplementos, medicamentos y tediosas restricciones parecen ser en los últimos tiempos las elecciones de muchos. De hecho, la salud parece haberse convertido en un privilegio o en una especie de suerte que favorece a quien ostenta.

    Por: Carlos D. Amodei *

    Nos hemos convertido en seres humanos que padecen un absoluto desconocimiento respecto a cómo llevar una vida, plena por lo menos en la salud física.

    Hemos sido convencidos de que nuestro cuerpo es el principal responsable de nuestras enfermedades, en contraste, nosotros somos la víctima. La creencia común de que el cuerpo se equivoca, que falla, que atenta contra nosotros parece ser de común aceptación.

    Nada más disparatado ni errado que pensar de ese modo. Lo que ocurre es que la irresponsabilidad con que las personas eligen vivir es la principal causa del padecimiento de patologías. Siempre somos responsables de las consecuencias que acarrean nuestras conductas.

    En este sentido, daré algunos consejos simples y prácticos para ayudar al cuerpo en la tarea maravillosa y perfecta que realiza para mantenernos con vida.

    Los ritmos de la naturaleza y su preciso reloj

    El cuerpo humano es regido por ritmos y secuencias; estos ritmos, por lo general, obedecen a la influencia de la luna y el sol, esto se conoce como ritmo circadiano.

    Seguir la rutina y los ritmos en la medida de lo posible contribuye en gran medida al bienestar del cuerpo y de nuestra mente.

    El ritmo adecuado:

    07.00 a 08.00 h.: Desayuno de la mañana.

    12.00 a 13.00 h.: Almuerzo (comida principal).

    14.00 a 18.00 h.: Digestión y absorción.

    19.00 a 20.00 h.: Cena.

    21.00 a 22.00 h.: Inicio del sueño.

    23.00 a 24.00 h.: Sueño profundo. Actividades hepáticas.

    24.00 a 02.00 h.: Desintoxicación y reparación.

    02.00 a 06.00 h.: Eliminación de desechos.

    Quizá, en la sociedad que vivimos y por nuestros avatares, no será fácil seguir este ritmo al pie de la letra, pero en la medida en que más nos respetemos, mejor podremos auto repararnos y darnos plenitud.

    Cabe aclarar que pasado el horario correspondiente, el cuerpo suprimirá la tarea y no será realizada hasta el otro día. Es decir, si me acuesto a las tres de la mañana, la reparación desintoxicación y actividad hepática no será realizada.

    Mantener limpios hígados y riñones

    Demás está aclarar que los alimentos orgánicos y saludables contribuyen a este proceso. Una técnica muy simple consiste en ingerir una cucharada sopera de aceite de oliva (primera prensada en frío extra virgen, artesanal no de marcas comerciales) con unas gotas de limón. Esto debe hacerse antes de acostarse y a primera hora de la mañana al levantarse. Esta técnica simple mantiene saludables el hígado y los riñones.

    Retrasar el desayuno

    No es saludable desayunar apenas uno se levanta, dado que el cuerpo continúa con tareas de desintoxicación. Lo ideal es tener un vaso de agua a temperatura natural con el jugo de unas rodajas de limón. Esto contribuye al ayudar al intestino en sus tareas y elimina parásitos por efecto del limón.

    Luego de 30 minutos sí puede desayunar. Esta comida debería integrarse por frutas o de un licuado realizado con leche almendras. La leche de almendras puede prepararse fácilmente: tome 10 o 12 almendras y déjelas en un vaso con agua antes de acostarse. Por la mañana agréguele medio litro de agua, procese en la licuadora y se ha obtenido medio litro de leche almendras. Agréguele una fruta (banana) y un poco de miel. Con dos vasos de esta bebida tiene todos los nutrientes que el organismo necesita, hasta el mediodía no tendría por qué tener hambre. ¡Haga la prueba!

    Cepillado en seco del cuerpo

    Un método muy eficaz para la desintoxicación del organismo, puede realizarse cepillando todo el cuerpo, con un cepillo de cerda natural de manera enérgica. Si no cuenta con un cepillo, puede realizarlo con una toalla seca.

    Recuerde que la piel es el órgano más grande que cuerpo tiene con renueva 100.000 células por segundo, pero construyen los poros de la piel. Si usted realiza este procedimiento aumentará la desintoxicación, la evacuación de tóxicos del organismo, aumentará el drenaje linfático y -buenas noticias- elimina el 99% de la celulitis, además de estimular el aceite natural de la piel.

    Le sugiero que lo haga antes de acostarse y por la mañana al levantarse. La utilización de cremas no es saludable, la mayoría contienen aluminio y obstruyen los poros de la piel.

    Exposición al sol

    El organismo necesita exposición solar todos los días. Para exponerse, primero cepíllese la piel, exponga la mayor cantidad de superficie posible del cuerpo, durante el tiempo que su cuerpo le diga que 'ya está bien'. Esto es, cuando sienta que no tolera más su exposición, entonces habrá sido suficiente.

    Cuando se vaya a exponer por mucho tiempo puede utilizar aceite de oliva o en su defecto gel de Aloe Vera.

    Evite la utilización de anteojos de sol, al filtrar el ultravioleta no puede ingresar a través del ojo y ser distribuido a todo el cuerpo para producir la curación.

    Otro beneficio que trae el sol es que la exposición a la luz natural aumenta la producción de un neurotransmisor llamado serotonina, que a la noche es transformada en melatonina, produciendo así un sueño normal. Una de las causas del insomnio es la falta de exposición a la luz natural.

    Hidratación

    Beber agua es uno de los elementos más importantes para la curación y el mantenimiento de la salud.

    Existen, en mi opinión, errores en cuanto a la cantidad de agua que una persona debe beber. Resáltese, dije agua, no líquido; las células sólo pueden restablecerse con agua no con otras sustancias. Respecto a la cantidad debe tenerse en cuenta que el color de su orina debe ser ámbar. Si es de color transparente usted ha bebido demasiado, si es oscura a usted le falta agua.

    Depuración de la sangre

    Un método extremadamente simple como extremadamente eficaz para la limpieza de la sangre y sus toxinas, lo es la inmersión en aguas salinas.

    Para realizarlo, tómese 400 g de sal marina gruesa, viértase en un balde de agua caliente. Coloque sus dos pies en el balde y relájese hasta que el agua pueda sentir que se enfría.

    Este procedimiento es eficaz dado que: al estar el agua caliente se produce dilatación de los poros, al contener mayor cantidad de sal el agua del balde que la que existe dentro del organismo, se produce OSMOSIS traccionando las toxinas contenidas en el organismo hacia afuera.

    Realícelo dos veces en un día una vez por semana, si usted está intoxicado puede realizarlo tres veces por semana. Luego tire el agua contenida en el balde en lugar seguro, le recuerdo que contiene todas las toxinas de su organismo. Notará el bienestar a los cinco minutos de haber puesto sus pies en el balde.

    Si usted sigue estos consejos simples pero científicamente comprobados, garantizo que mejorará notablemente y en muy poco tiempo. Recuerde que está al mando una máquina increíble que es su cuerpo humano. Sólo requiere darle lo mejor y mantenerlo limpio; él se lo agradecerá devolviéndole plenitud.

    *Carlos D. Amodei. PhD.

    dr_amodei@yahoo.com.ar

    Twitter: @dr_amodei

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