Por La república
El precio del barril de Brent supera en estos momentos el 2% de caída, con mínimos por debajo de los US$48, a pesar de la revisión al alza en las estimaciones de demanda de crudo por parte de la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
Las caídas afianzan la cotización del barril de Brent por debajo del umbral de los US$50. El precio del barril tipo West Texas, por su parte, se sitúa por debajo de los US$45.
Los expertos de Goldman Sachs citan este nuevo correctivo para destacar la debilidad que persiste en los fundamentales de los mercados energéticos. La firma estadounidense subraya en este sentido que el exceso de oferta de petróleo es mayor de lo que habían previsto con anterioridad, y que este sobreabastecimiento continuará a lo largo de 2016.
El incremento esperado en la producción de los países de la Opep contrasta con los riesgos bajistas del lado de la demanda. Según Goldman Sachs, la desaceleración en China enfría las perspectivas de demanda de crudo del gigante asiático, y el efecto contagio de su freno económico podría hacer mella, con posterioridad, en la demanda de otros países.
Con este panorama, los analistas de la firma estadounidense no descartan una nueva oleada bajista en el mercado del petróleo que podría hundir su cotización, incluso, hasta los US$20.
Sin llegar a este extremo, Goldman Sachs revisa a la baja sus proyecciones sobre el precio del crudo. Si se cumplen sus pronósticos, el barril tipo West Texas rondará los US$40 durante los próximos seis meses, y se situaría cerca de los US$45 en 12 meses.
El barril de Brent, de referencia en Europa, apenas recuperaría lo perdido en los últimos meses. Su nueva previsión para el barril de Brent en 2015 se desinfla desde los US$58,2 hasta los US$53,7. Un recorte más severo aún sufren sus estimaciones para el próximo año. En 2016 el Brent rondaría los US$49,5, muy por debajo de los US$62 barajados con anterioridad.
La nueva oleada bajista en el precio del petróleo ha reactivado los rumores de una cumbre de emergencia de la Opep para intentar frenar su desplome. Pero una vez más Arabia Saudí enfría estas especulaciones al descartar públicamente la convocatoria de una cumbre.
El precio del barril de Brent supera en estos momentos el 2% de caída, con mínimos por debajo de los US$48, a pesar de la revisión al alza en las estimaciones de demanda de crudo por parte de la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
Las caídas afianzan la cotización del barril de Brent por debajo del umbral de los US$50. El precio del barril tipo West Texas, por su parte, se sitúa por debajo de los US$45.
Los expertos de Goldman Sachs citan este nuevo correctivo para destacar la debilidad que persiste en los fundamentales de los mercados energéticos. La firma estadounidense subraya en este sentido que el exceso de oferta de petróleo es mayor de lo que habían previsto con anterioridad, y que este sobreabastecimiento continuará a lo largo de 2016.
El incremento esperado en la producción de los países de la Opep contrasta con los riesgos bajistas del lado de la demanda. Según Goldman Sachs, la desaceleración en China enfría las perspectivas de demanda de crudo del gigante asiático, y el efecto contagio de su freno económico podría hacer mella, con posterioridad, en la demanda de otros países.
Con este panorama, los analistas de la firma estadounidense no descartan una nueva oleada bajista en el mercado del petróleo que podría hundir su cotización, incluso, hasta los US$20.
Sin llegar a este extremo, Goldman Sachs revisa a la baja sus proyecciones sobre el precio del crudo. Si se cumplen sus pronósticos, el barril tipo West Texas rondará los US$40 durante los próximos seis meses, y se situaría cerca de los US$45 en 12 meses.
El barril de Brent, de referencia en Europa, apenas recuperaría lo perdido en los últimos meses. Su nueva previsión para el barril de Brent en 2015 se desinfla desde los US$58,2 hasta los US$53,7. Un recorte más severo aún sufren sus estimaciones para el próximo año. En 2016 el Brent rondaría los US$49,5, muy por debajo de los US$62 barajados con anterioridad.
La nueva oleada bajista en el precio del petróleo ha reactivado los rumores de una cumbre de emergencia de la Opep para intentar frenar su desplome. Pero una vez más Arabia Saudí enfría estas especulaciones al descartar públicamente la convocatoria de una cumbre.
