El fabricante canadiense de aviones Bombardier anunció este lunes que se concentrará en el sector de aviones ejecutivos o de negocios, luego de abandonar la aviación comercial.
'Una nueva y prometedora etapa se abre hoy para Bombardier', sostuvo el presidente de la compañía, Alain Bellemare, al anunciar la 'decisión estratégica' del grupo, que venderá su sector ferroviario a Alstom como parte de su estrategia para reducir la deuda.
El grupo francés Alstom hizo oficial la compra de la actividad de transportes de la canadiense Bombardier a un precio entre 5.800 y 6.200 millones de euros, lo que supone la creación del segundo mayor grupo ferroviario del mundo, tras el chino CRRC.
'Concentraremos todo nuestro capital, toda nuestra energía y nuestros recursos en acelerar el crecimiento y la expansión de los márgenes (de ganancia) de nuestras actividades por aviones de negocios', indicó el ejecutivo en un comunicado.
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El grupo canadiense lidera el sector de aviones ejecutivos, con una filial que emplea a 18.000 personas en todo el mundo.
La previsión de facturación para 2020 es de unos US$7.000 millones, según la empresa.
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La actividad de esta rama es más cíclica que la del sector ferroviario y los principales competidores de Bombardier -como el brasileño Embraer- pueden apostar a sus ventas en el rubro de equipamiento militar para compensar variaciones en la coyuntura económica.
El fabricante canadiense, que está en un proceso de saneamiento y reducción de deuda, ha cerrado 2019 con unas pérdidas de US$1.607 millones frente a los US$318 millones que ganó en 2018. Los ingresos han caído el 3% a los US$15.757 millones y ebitda ajustado retrocede el 31% a los US$896 millones.
