Warren Buffett ha pegado su primer tiro a un elefante y ha hecho blanco. Berkshire Hathaway ha anunciado que ejercerá los warrants (producto negociable que otorga el derecho pero no la obligación de comprar o vender el subyacente en la fecha de vencimiento) que tiene de Bank of America para comprar 700 millones de acciones ordinarias y convertirse así en el principal accionista de la entidad estadounidense.
El precio unitario es de US$7,14 con lo que la inversión alcanza los US$5.000 millones. Al cierre de la sesión del pasado jueves, esta participación ya vale más de US$17.000 millones.
Una vez se haga efectiva esta operación, Buffett pasará a ser el principal accionista de Bank of America, superando a Vanguard, que tiene un 6,6% de la entidad.
De esta manera, Bershire Hathaway aumenta el peso de los bancos en su cartera. El millonario inversor ya posee una participación del 2,9% en Goldman Sachs y es el principal accionista de Wells Fargo con el 10%. Además tiene de US Bancorp un 6%.
Con la decisión de hoy, da marcha atrás en la idea que tenía inicialmente cuando compró los warrants que no ejercería hasta su vencimiento en 2021. Sin embargo, en su última junta anual de accionistas el oráculo de Omaha cambiaba de opinión, asegurando que 'si el dividendo de las acciones ordinarias del banco -actualmente en 30 centavos- superaban los 44 centavos antes de 2021, la operación de intercambio se anticiparía', como así ha sido.
Con todo, esta operación es sólo un aperitivo de lo que puede estar por venir. No en vano, su brazo inversor cuenta con la mayor caja de toda su historia, un efectivo de US$100.000 millones que a Buffett le queman en las manos.
De hecho, en su último encuentro anual, celebrado el pasado mes de mayo, el inversor alimentó las especulaciones afirmando que 'estamos en un punto en el que la carga de la prueba realmente nos apunta, es un gran momento' y añadió que 'no hay ninguna forma en la que yo pueda volver aquí dentro de tres años para decir que tenemos US$150.000 millones en cash'.
