El 'skyline' de San Salvador sigue modificándose, para 2017 se espera que este cambio llegue a un nuevo nivel por el desarrollo de nuevos -y ambiciosos- proyectos. Uno de los más relevantes es Millennium Plaza, el cual incluye la edificación de una torre de 30 pisos.
El proyecto es desarrollado por Inversiones SIMCO, el brazo inmobiliario del local Grupo Simán, que apuesta por el desarrollo de un complejo de usos mixtos que incluye comercios, oficinas y vivienda de lujo y que daría paso a la torre más alta del país.
'Millennium Plaza será el complejo más completo de usos mixtos de El Salvador, que ofrecerá a sus inquilinos y visitantes su lugar de trabajo, residencia, recreación, compras y hospedaje, en un mismo espacio y con la comodidad de acceder directamente a través de una pasarela al centro comercial Galerías', explica Miguel Simán, presidente de Inversiones SIMCO.
Millenium Plaza es el nuevo desarrollo de Inversiones SIMCO. El complejo de usos mixtos conectará con el centro comercial Galerías que la firma opera en el Paseo General Escalón de San Salvador.
De acuerdo con el ejecutivo, el proyecto es especial porque está en el corazón de la ciudad, a unos metros de la plaza del Divino Salvador del Mundo (ícono de la capital salvadoreña), un distrito que en un radio de unos 5 km concentra sedes de corporaciones, embajadas y centros de operaciones de los principales bancos de la plaza.
'(La zona es) considerada el centro financiero de la capital. Eventualmente, Banco Agrícola desarrollará sus oficinas corporativas contiguo a Millennium Plaza y se integrarán por medio de una plaza área y el estacionamiento', dijo Simán a E&N.
Millennium Plaza es el último de los grandes proyectos en marcha desde este año y se suma a otros como la torre Quattro -(de Grupo Agrisal) la cuarta pieza del World Trade Center San Salvador-; Plaza Presidente (de Inversiones Bosch) y de Insigne (Calidad Inmobiliaria), por mencionar algunos.
De acuerdo con datos de la Cámara Salvadoreña de la Industria de la Construcción (CASALCO), al cierre de 2016 se tenían identificados 79 proyectos, el 86% son para vivienda incluyendo edificios de apartamentos, el resto corresponde a usos mixtos, comercio y oficinas, 'los cuales constituyen un monto importante para dinamizar la economía del país', dice el director ejecutivo de la Cámara, José Velásquez.
174 proyectos en factibilidad
ángel Díaz, presidente de CASALCO, a la fecha hay 174 proyectos en proceso de autorización, los cuales si logran pasar las aprobaciones legales correspondientes podrían generar 136.000 empleos en los próximos dos años.
El 2017 supone un parteaguas para el sector, dadas las previsiones de inversión del sector, hay un potencial de US1.120 millones entre proyectos públicos y privados.
La previsión de inversión del sector público es alrededor de US$520 millones. Según los datos recopilados por entidades como el Ministerio de Obras Públicas y el Fondo de Convervación Vial, la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma y la Comisión Hidroeléctrica del Río Lempa e incluso de la Dirección General de Centros Penales, que ejecutarán obras de infraestructura.
Mientras tanto, el sector privado para este año espera invertir US$600 millones. En el sector hay optimismo, luego que la Administración Nacional de Acuenductos y Alcantarillados otorgara el aval a las factibilidades de los 174 proyectos.
"La industria de la construcción es un importante dinamizador de la economía del país y es la cara visible del desarrollo. La relación entre la empresa privada y el Estado es determinante para el desarrollo económico del país y es necesario que se lleven a cabo procesos transparentes y claros en cada uno de los proyectos", dijo Díaz.
El panorama del sector de la construcción es de recuperación, tras el impacto de la crisis de 2008. Tras el crash se vino el cierre del grifo del financiamiento, las casas matrices de los bancos endurecieron las condiciones para la construcción y la compra de vivienda -algo que si bien no ha cambiado-, ha puesto una nueva realidad al sector que se ha ajustado al nuevo entorno.
Los proyectos de SIMCO, Agrisal, Bosch y Calidad Inmobiliaria tienen algunos puntos en común, los tres primeros son parte de estrategias de uso mixto que integran espacios para oficinas, comercios y hoteles.
Nuevos modelos de construcción
De ellos Agrisal es el que tiene más camino avanzado, la compañía es dueña del Hotel Crowne Plaza, uno de los principales hoteles del país, al que se integró primero con las dos torres del World Trade Center San Salvador y luego con Plaza y Torre Futura y que se complementará con Quattro, un edificio planificado para oficinas que explora nuevos conceptos arquitectónicos.
En esta dinámica también entra Vía del Corso, un proyecto a cargo de Tuscania, que se desarrolla en la carretera al Puerto de La Libertad, un área de rápido desarrollo donde la meta es integrar grandes áreas verdes.
Giusepe Angelucci, presidente de Tuscania, explica que el proyecto consta de 12 etapas y que incluye residenciales de baja y alta densidad, además de áreas destinadas a oficinas, comercios y entretenimiento, pero todo con el norte de la sostenibilidad.
"La palabra sostenibilidad antes no las conocíamos o no la usábamos", dice el ejecutivo que considera que el futuro está en el desarrollo de apuestas eficientes que permitan reusar agua y materiales, junto a beneficios como la seguridad, todo dentro de un espacio urbano donde se privilegia al peatón y no al vehículo.
Vía del Corso, es un nuevo proyecto de Tuscania. Está ubicado en la carretera al Puerto de La Libertad y entre sus nuevos inquilinos destaca el Campus Tigo.
El nuevo contexto está despertando el interés incluso de jugadores extranjeros. El guatemalteco Calidad Inmobiliaria trabaja en Insigne, su segundo edificio en El Salvador.
Oscar Aparicio, gerente de País de Calidad Inmobiliaria, dijo a E&N que Insigne forma parte de la estrategia de expansión de la compañía y que dada la experiencia previa con Avante, decidieron lanzar uno nuevo proyecto, el cual estará listo en el primer trimestre de 2018.
"Dentro de los estudios y evaluaciones realizadas, comprendimos que existe un mercado no atendido de oficinas ‘premium’ que cuenten con espacios con áreas menores a las que existen en el mercado, así como con amenidades que puedan fomentar, como en nuestro caso, la colaboración que es nuestro concepto principal, el cual beneficia las comunidades de negocios que se forman en estos desarrollos", describe Aparicio.
Insigne es el segundo proyecto que ejecuta la guatemalteca Calidad Inmobiliaria en El Salvador. El edificio está en la Zona Rosa de San Salvador.
Así, 2017 se perfila con un año de nuevos proyectos para las inmobiliarias que ahora saldrán a la caza de nuevos inquilinos en un ambiente cada vez más competitivo.
