El espíritu de Flor de Caña se origina por la audacia y determinación de un joven explorador y visionario de Génova, Italia, Francisco Alfredo Pellas Canessa. En 1875, a sus 25 años, arriesgó todo dejando atrás su familia y las comodidades del Viejo Continente para emprender una aventura que daría inicio a un legado familiar de 5 generaciones en la exuberante Nicaragua: Ron Flor de Caña.
El ron nació en 1890 a la sombra del volcán San Cristóbal, uno de los más activos de Latinoamérica. En los años 50 traspasa fronteras por primera vez para incursionar en mercados en Centro y Suramérica. En la actualidad, gracias a su calidad inigualable y a sus reconocimientos internacionales, la marca llega hoy a más de 40 países en los 5 continentes. La inigualable calidad de Flor de Caña, hecho con alcohol de máxima pureza, ha sido la responsable de ganarse el corazón de sus consumidores durante más de 125 años. Cada gota de Flor de Caña es añejada naturalmente, sin azúcar ni aditivos, pero si con el mejor de los ingredientes: la pasión por la excelencia. Esto lo ha llevado a ser un ron multipremiado.
Con más de 180 galardones internacionales, Flor de Caña es el ron más premiado del mundo. Además de ser la marca #1 exportada de Nicaragua y el ron súper premium líder en Centroamérica, ha sido nombrado como el mejor ron del mundo en reconocidas competencias internacionales en Londres, San Francisco y Chicago.
En el año 2014, la empresa perteneciente al grupo Pellas lanzó Flor de Caña 25, la joya de la corona, un ron ultrapremium con 25 años de añejamiento. Fue reconocido como el "Ron #1 en el Planeta" por The Huffington Post; "Entre los Mejores Productos del Mundo" en el San Francisco World Spirits Competition; "Mejor Ron Nuevo del Año" por Caribbean Journal; "Design Masters" por The Spirits Business de Londres y; "Mejor Empaque" en el Congreso Internacional del Ron en Madrid.
Hitos de la marca
1980: Durante los años 80, a raíz de la revolución política de Nicaragua de 1979 y un periodo de hiperinflación que disminuyó el consumo a nivel nacional, la empresa toma la decisión estratégica de guardar grandes reservas de ron. Estos rones se envejecieron pacientemente y hoy en día, Flor de Caña puede declarar con orgullo que tiene una de las reservas más grandes de rones añejos del mundo.
1999: Arranca la expansión global de Flor de Caña en mercados internacionales, llevando la marca a más de 40 países en los 5 continentes.
2014: Lanzamiento de Flor de Caña 25, la joya de la corona, un ron ultra-premium con 25 años de añejamiento. Fue reconocido como el "Ron #1 en el Planeta" por The Huffington Post, "Entre los Mejores Productos del Mundo" en el San Francisco World Spirits Competition, "Mejor Ron Nuevo del Año" por Caribbean Journal, "Design Masters" por The Spirits Business de Londres y "Mejor Empaque" en el Congreso Internacional del Ron en Madrid.
Curiosidades de la marca
- Flor de Caña cuenta con más de 125 años y 5 generaciones de tradición familiar.
- Flor de Caña es un ron enriquecido por las tierras volcánicas del volcán San Cristóbal, uno de los más activos de Latinoamérica.
- Flor de Caña ha sido nombrado como el mejor ron del mundo en Londres, San Francisco y Chicago.
- Flor de Caña es destilado con energía 100% renovable y cada año la empresa siembra 50,000 arboles.
- Flor de Caña es 100% naturalmente añejado en barricas de bourbon, sin azúcar o aditivos.
Top Of Heart
Flor de Caña es una marca que se ha venido re-inventando y se ha mantenido actualizada con las últimas tecnologías para proveer a sus consumidores y fans experiencias únicas. Las redes sociales han probado ser un canal importante para interactuar con nuestros consumidores alrededor del mundo, por eso estamos presentes en las principales redes sociales proveyendo contenido interesante y atractivo. Hemos incursionado también en el desarrollo de aplicaciones móviles y en tecnología de realidad virtual. También tenemos eventos especiales como nuestra competencia de bartenders Rum Frontiers y nuestra mezcla única de gastronomía y mixología llamada Mixtronomy. No se trata de hacer mercadeo, sino de conectar con la gente y crear experiencias inolvidables.
