Cada uno de los países de la región centroamericana puede dar muestras de tener en sus mercados, empresas insignes por la forma en que crean ambientes laborales excelentes. Ya sean multinacionales, empresas de capital local, con pocos o muchos colaboradores, lo cierto es que la tendencia de privilegiar el capital humano con programas que permitan su desarrollo integral, está cada vez más asentada en el istmo.
Si bien, algunas de las buenas prácticas han devenido de empresas multinacionales con una trayectoria más larga en temas de políticas laborales, sistemas de compensa- ciones, de evaluación de desempeño, hora- rios exibles y otros factores a favor de la motivación y aumento de productividad, las rmas locales han hecho también lo suyo.
En la mayoría de las empresas hay una interesante orientación a conectar la satis- facción de sus colaboradores con un senti- miento de orgullo por las marcas, produc- tos, servicios o el impacto que a nivel local, genera la actividad.
Se esfuerzan por convertir a la organiza- ción en un ‘segundo hogar’ para sus traba- jadores, aun cuando haya operaciones en diferentes países y la comunicación necesa- riamente deba ser virtual.
Industrias Licoreras de Guatemala es un ejemplo de ello. Su tamaño, la variedad de marcas y subsidiarias la convierte en un receptor de empleo, pero también en un ge- nerador de lealtad por parte de su gente. Su connotación de ‘gran empresa’ trasciende el factor tamaño, pues es considerada un lugar con excelente ambiente laboral.
Cuando los empleados de enden los intereses de su empresa como propios, se logra tener el combustible necesario para alcanzar los objetivos, como bien lo dice Distribuidora Salvadoreña (Disal).
Si bien, algunas de las buenas prácticas han devenido de empresas multinacionales con una trayectoria más larga en temas de políticas laborales, sistemas de compensa- ciones, de evaluación de desempeño, hora- rios exibles y otros factores a favor de la motivación y aumento de productividad, las rmas locales han hecho también lo suyo.
En la mayoría de las empresas hay una interesante orientación a conectar la satis- facción de sus colaboradores con un senti- miento de orgullo por las marcas, produc- tos, servicios o el impacto que a nivel local, genera la actividad.
Se esfuerzan por convertir a la organiza- ción en un ‘segundo hogar’ para sus traba- jadores, aun cuando haya operaciones en diferentes países y la comunicación necesa- riamente deba ser virtual.
Industrias Licoreras de Guatemala es un ejemplo de ello. Su tamaño, la variedad de marcas y subsidiarias la convierte en un receptor de empleo, pero también en un ge- nerador de lealtad por parte de su gente. Su connotación de ‘gran empresa’ trasciende el factor tamaño, pues es considerada un lugar con excelente ambiente laboral.
Cuando los empleados de enden los intereses de su empresa como propios, se logra tener el combustible necesario para alcanzar los objetivos, como bien lo dice Distribuidora Salvadoreña (Disal).
Estas son las Mejores Empresas para Trabajar Guatemala
