El culebrón tecnológico de fin de año terminó abruptamente. Tras una reunión del consejo, el gigante de los semiconductores Qualcomm anuncio ayer el rechazó de la oferta de fusión presentada por su rival Broadcom por US$130.000 millones que hubiera sido la mayor absorción de ese sector desde que existen los smartphones .
En plena guerra judicial entre Qualcomm y Apple, la firma Broadcom aprovechó la ocasión y elevó una propuesta la semana pasada por la cual iba a pagar US$70 por acción (US$130.000 millones). Esta cifra incluía US$25.000 millones en deuda, para adquirir la totalidad de las acciones de su competidora Qualcomm, lo que hubiera supuesto un nuevo récord en el sector tecnológico.
El esplendor en el área de semiconductores por el crecimiento de los teléfonos inteligentes y otros dispositivos vinculados a la web, fue lo que tentó a Broadcom para hacerse de Qualcomm.
Según dio a conocer Reuters, el consejo de Qualcomm se habría reunido este pasado domingo para revisar la oferta de compra recibida desde Broadcom.
La propuesta 'subvalora significativamente la posición de liderazgo de Qualcomm relativa a tecnología móvil y nuestras perspectivas de crecimiento', dijo Paul Jacobs, presidente de Qualcomm, ni más ni menos que una de las principales proveedoras de Apple.
Por su parte, Steve Mollenkopf, jefe ejecutivo de la compañía que tiene sede en California, dijo que Qualcomm tiene confianza en su futuro.
Añadió que ninguna otra compañía del área de semiconductores esta mejor posicionada que la suya tecnologías móviles, Internet de los cosas, automóviles, entre otras.
'Confiamos en nuestra capacidad de crear significativo valor adicional para nuestros accionistas mientras seguimos creciendo en esos atractivos segmentos y lideramos la transición hacia el 5G', afirmó en alusión a la quinta generación redes inalámbricas.
