Las acciones de United Airlines cayeron un 12% después de que el presidente ejecutivo, Oscar Muñoz, dijera a los inversionistas que la compañía se había hundido en 'un pozo competitivo'.
Durante una llamada sobre las ganancias de la compañía el jueves por la mañana, Muñoz y otros ejecutivos de la compañía recibieron un aluvión de preguntas de analistas de Wall Street sobre el desempeño de la compañía.
Y, al parecer, sus respuestas no ayudaron a calmar las preocupaciones de los inversores.
United ha sufrido últimamente debido a que la compañía tiene problemas para mantener bajos los costos, conservar su cuota de mercado y recuperar la confianza de los clientes en medio de un escándalo de servicio al cliente que sacudió a la compañía en abril. Sus acciones han caído casi un 18% en lo que va del año.
La aerolínea ya se encontraba en una situación difícil cuando Munoz asumió el control en septiembre de 2015. La fusión de United en 2010 con Continental Airlines dejó a la compañía fracturada internamente, y el predecesor de Muñoz fue despedido en medio de un escándalo por colusión con funcionarios electos.
Algunos de los problemas de la compañía escapan a su control, como la desastrosa temporada de huracanes que obligó a miles de cancelaciones de vuelos.
Pero quizás el incidente más notable de este año fue la violenta expulsión de un pasajero en uno de sus vuelos, a quien dejaron ensangrentado y con la nariz rota, lo que provocó indignación generalizada y dañó gravemente la imagen de United.
