Las estadísticas del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) denotan la buena marcha de la economía nicaragüense, al mostrar un crecimiento del 11,8% de trabajadores afiliados a la Seguridad Social, alcanzado los 810.654 empleados formales, a 31 de diciembre de 2015; 85.640 más que un año atrás, según datos del Banco Central de Nicaragua (BCN)
En los últimos 10 años las cifras de trabajadores inscritos al INSS han venido creciendo a un ritmo promedio anual del 10%, pasando de 420.316 en 2006 a 810.654 en 2015, un crecimiento del 92,8% en ese periodo.
El crecimiento promedio anual en los últimos cinco años ha sido de 50.000 nuevos asegurados, siendo 2015 el de mayor crecimiento, con 85.640.
Algunos economistas y empresarios del sector privado han manifestado que el crecimiento anual en el número de asegurados es aún insuficiente, porque en el país cada año se suman más de 100.000 nuevos trabajadores a la Población Económicamente Activa (PEA), calculada en 3,2 millones, informa el nicaragüense El Nuevo Diaro.
"Esto significa que solo se está incorporando a la formalidad a un poco más del 60% del total de empleos que se generan anualmente en Nicaragua", señaló el economista Alberto Ramírez.
Según el especialista, lo ideal sería que el Instituto de Seguridad Social absorbiera esos 100.000 nuevos trabajadores que se integran a la PEA.
Para Ramírez, el hecho de que el número de asegurados esté progresando por encima del crecimiento económico que en 2015 fue del 4,3%, según cifras oficiales, es muy positivo.
"Esto quiere decir que el empleo formal está creciendo más que la economía, que el sector informal se está formalizando, no es que haya más empleos", indicó el economista.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) publicó en 2014 un informe en el que señala una evolución positiva en la formalización del empleo en Nicaragua, Chile y Costa Rica.
Los sectores que más impulsan la creación del empleo formal son la construcción, minerías, servicios y las zonas francas.
Las autoridades nacionales estiman que en Nicaragua el 60% del empleo es informal y solo un 40% de la actividad laboral es formal.
