Por AFP
La Corte de Panamá denegó este martes la prisión domiciliaria solicitada por el expresidente Ricardo Martinelli, encarcelado por presuntamente espiar a opositores durante su gobierno (2009-2014).
'El pleno de la Corte Suprema de Justicia decide negar la petición de revisión de la detención provisional aplicada al señor diputado del Parlamento Centroamericano Ricardo Alberto Martinelli Berrocal', según un fallo leído por el magistrado suplente Luis Mario Carrasco.
El fallo añade que no se encontraron 'elementos nuevos' que jurídicamente permitan cambiar la detención provisional.
La decisión fue tomada por unanimidad por la Corte panameña, encargada de investigar al expresidente por su condición de diputado del Parlamento Centroamericano.
Martinelli, de 66 años, está acusado de malversar fondos para crear una red de espionaje que alcanzó a 150 personas durante su mandato, incluyendo periodistas y políticos, muchos de ellos críticos con su gestión. Martinelli dice ser víctima de un montaje para inhabilitarlo políticamente.
Sus abogados habían solicitado la audiencia para pedir prisión domiciliaria para el exgobernante, quien llegó a la sala con la camiseta de la selección de fútbol de Panamá y mostrando de manera airada las esposas con los brazos en alto.
Ahora la Corte debe decidir el próximo día 25 si lo envía a juicio por inviolabilidad del secreto y el derecho a la intimidad y peculado.
Durante la audiencia Martinelli aseguró que este caso es un montaje de la oposición para inhabilitarlo.
'Aquí sencillamente hay una mano negra detrás de mi caso (...) Yo soy inocente, este es un proceso que me han armado políticamente para inhabilitarme', dijo Martinelli.
'Yo he venido a Panamá a enfrentar este caso y no tengo las más remotas intenciones de partir y de ir a ningún lado', añadió el exmandatario.
Era un 'peligro de fuga'
Martinelli fue extraditado a Panamá el pasado día 11 desde Estados Unidos, donde estuvo encarcelado un año en una prisión federal de Miami, donde residía desde 2015 para eludir la justicia panameña.
A las pocas horas de llegar a su país, y tras pisar la cárcel brevemente, el expresidente manifestó sentirse mal, por lo que fue llevado a un hospital, donde permaneció ingresado varios días por hipertensión y una arritmia.
Tras recuperarse fue enviado nuevamente a la prisión El renacer, a orillas del Canal de Panamá, la misma donde estuvo el exdictador Manuel Antonio Noriega.
Ahora sus abogados pedían arresto domiciliario porque a su juicio el expresidente tiene graves problemas de salud, no hay peligro de fuga ni posibilidad de incidir en el caso o destruir pruebas.
'He venido aquí a recuperar mi reputación y mi nombre', sostuvo Martinelli, quien dice ser un 'perseguido político' de su antiguo aliado y actual presidente Juan Carlos Varela.
Multimillonario empresario de supermercados, accedió al poder con el 60% de los votos y un discurso contra la corrupción, pero tras su paso por el gobierno, acumula en la Corte una veintena de investigaciones por diferentes escándalos.
Ni los abogados ni el vocero del expresidente quisieron dar declaraciones tras la decisión judicial.
'Creo que se respetó la ley y la constitución de este país, eso es para nosotros lo más importante', dijo Balbina Herrera, excandidata presidencial en 2009 y una de las querellantes en la causa.
'Es justo porque este señor representaba un peligro de fuga y un peligro para las pruebas', añadió el abogado querellante Carlos Herrera.
La Corte de Panamá denegó este martes la prisión domiciliaria solicitada por el expresidente Ricardo Martinelli, encarcelado por presuntamente espiar a opositores durante su gobierno (2009-2014).
'El pleno de la Corte Suprema de Justicia decide negar la petición de revisión de la detención provisional aplicada al señor diputado del Parlamento Centroamericano Ricardo Alberto Martinelli Berrocal', según un fallo leído por el magistrado suplente Luis Mario Carrasco.
El fallo añade que no se encontraron 'elementos nuevos' que jurídicamente permitan cambiar la detención provisional.
La decisión fue tomada por unanimidad por la Corte panameña, encargada de investigar al expresidente por su condición de diputado del Parlamento Centroamericano.
Martinelli, de 66 años, está acusado de malversar fondos para crear una red de espionaje que alcanzó a 150 personas durante su mandato, incluyendo periodistas y políticos, muchos de ellos críticos con su gestión. Martinelli dice ser víctima de un montaje para inhabilitarlo políticamente.
Sus abogados habían solicitado la audiencia para pedir prisión domiciliaria para el exgobernante, quien llegó a la sala con la camiseta de la selección de fútbol de Panamá y mostrando de manera airada las esposas con los brazos en alto.
Ahora la Corte debe decidir el próximo día 25 si lo envía a juicio por inviolabilidad del secreto y el derecho a la intimidad y peculado.
Durante la audiencia Martinelli aseguró que este caso es un montaje de la oposición para inhabilitarlo.
'Aquí sencillamente hay una mano negra detrás de mi caso (...) Yo soy inocente, este es un proceso que me han armado políticamente para inhabilitarme', dijo Martinelli.
'Yo he venido a Panamá a enfrentar este caso y no tengo las más remotas intenciones de partir y de ir a ningún lado', añadió el exmandatario.
Era un 'peligro de fuga'
Martinelli fue extraditado a Panamá el pasado día 11 desde Estados Unidos, donde estuvo encarcelado un año en una prisión federal de Miami, donde residía desde 2015 para eludir la justicia panameña.
A las pocas horas de llegar a su país, y tras pisar la cárcel brevemente, el expresidente manifestó sentirse mal, por lo que fue llevado a un hospital, donde permaneció ingresado varios días por hipertensión y una arritmia.
Tras recuperarse fue enviado nuevamente a la prisión El renacer, a orillas del Canal de Panamá, la misma donde estuvo el exdictador Manuel Antonio Noriega.
Ahora sus abogados pedían arresto domiciliario porque a su juicio el expresidente tiene graves problemas de salud, no hay peligro de fuga ni posibilidad de incidir en el caso o destruir pruebas.
'He venido aquí a recuperar mi reputación y mi nombre', sostuvo Martinelli, quien dice ser un 'perseguido político' de su antiguo aliado y actual presidente Juan Carlos Varela.
Multimillonario empresario de supermercados, accedió al poder con el 60% de los votos y un discurso contra la corrupción, pero tras su paso por el gobierno, acumula en la Corte una veintena de investigaciones por diferentes escándalos.
Ni los abogados ni el vocero del expresidente quisieron dar declaraciones tras la decisión judicial.
'Creo que se respetó la ley y la constitución de este país, eso es para nosotros lo más importante', dijo Balbina Herrera, excandidata presidencial en 2009 y una de las querellantes en la causa.
'Es justo porque este señor representaba un peligro de fuga y un peligro para las pruebas', añadió el abogado querellante Carlos Herrera.
