Por Economiahoy.mx
Este diseñador tiene claro que la ciencia ficción no está tan alejada de la realidad y por eso ha decidido desarrollar un rascacielos de lujo con una zona de aterrizaje en la azotea de 460 metros cuadrados para estacionar vehículos aéreos de despegue y aterrizaje en vertical (VTOL).
Así, los dueños de cualquiera de los apartamentos de este rascacielos podrán acceder a su casa directamente desde el aire a través de un vestíbulo aéreo y mediante un ascensor de cristal que los dejará en la puerta de su hogar. El rascacielos de 200 metros de altura y 60 plantas está en construcción y ya va por el piso 47.
'El futuro del transporte está en la aviación urbana que está más cerca de la realidad de lo que cabría esperar. Los vehículos voladores usarán el espacio aéreo para aliviar la congestión del transporte y el tráfico en tierra. Además, estos vehículos son como un helicóptero, pero mucho más silenciosos, funciona electrónicamente y es respetuoso con el medio ambiente', dijo el arquitecto. Para esta realidad, Uber está trabajando ya hace un tiempo junto con la NASA en el proyecto denominado Uber Air, que se basará en el uso de vehículos aéreos eléctricos.
Sin embargo, Uber no es la única empresa interesada en los vehículos aéreos. Existen varias compañías que están invirtiendo grandes sumas de dinero con el objetivo de aprovechar los avances en motores eléctricos, nuevas tecnologías aplicadas a las baterías y softwares autónomos para aplicarlos al transporte aéreo particular.
El diseñador del rascacielos ha explicado que un buen arquitecto y constructor debe estar al día de las principales tendencias en el mercado para dar a los clientes lo que quieren, incluso antes de que lo necesiten, y bajo esa premisa ha desarrollado el edificio.
Este diseñador tiene claro que la ciencia ficción no está tan alejada de la realidad y por eso ha decidido desarrollar un rascacielos de lujo con una zona de aterrizaje en la azotea de 460 metros cuadrados para estacionar vehículos aéreos de despegue y aterrizaje en vertical (VTOL).
Así, los dueños de cualquiera de los apartamentos de este rascacielos podrán acceder a su casa directamente desde el aire a través de un vestíbulo aéreo y mediante un ascensor de cristal que los dejará en la puerta de su hogar. El rascacielos de 200 metros de altura y 60 plantas está en construcción y ya va por el piso 47.
La realidad supera la ficción
Aunque pueda parecerlo, la idea no es tan descabellada. Como explica Dan Kodsi, la idea surgió tras leer que la famosa empresa de vehículos y transporte Uber está pensando en ofrecer un servicio de transporte vertical con despegue y aterrizaje en lugares como Dubái o Los ángeles dentro de unos dos años.'El futuro del transporte está en la aviación urbana que está más cerca de la realidad de lo que cabría esperar. Los vehículos voladores usarán el espacio aéreo para aliviar la congestión del transporte y el tráfico en tierra. Además, estos vehículos son como un helicóptero, pero mucho más silenciosos, funciona electrónicamente y es respetuoso con el medio ambiente', dijo el arquitecto. Para esta realidad, Uber está trabajando ya hace un tiempo junto con la NASA en el proyecto denominado Uber Air, que se basará en el uso de vehículos aéreos eléctricos.
Sin embargo, Uber no es la única empresa interesada en los vehículos aéreos. Existen varias compañías que están invirtiendo grandes sumas de dinero con el objetivo de aprovechar los avances en motores eléctricos, nuevas tecnologías aplicadas a las baterías y softwares autónomos para aplicarlos al transporte aéreo particular.
El diseñador del rascacielos ha explicado que un buen arquitecto y constructor debe estar al día de las principales tendencias en el mercado para dar a los clientes lo que quieren, incluso antes de que lo necesiten, y bajo esa premisa ha desarrollado el edificio.
Casi un millón de dólares
Además de ofrecer este servicio de aterrizaje y despegue, el rascacielos se está construyendo con los mejores materiales del mercado y tiene una ubicación privilegiada, frente a la costa de Miami, y junto con su altura, proporcionará a los huéspedes las mejores vistas.Ese es el motivo de que un piso de dos habitaciones en el rascacielos tenga un coste de 980,000 dólares. A pesar de ello, el precio no parece ser ningún problema: sin haber finalizado la construcción se ha vendido un 75% de los apartamentos.
